OLD LOOKS AND FOLKS THAT FLEW AWAY



Aqui estoy por fin descansado tras haber dormido tantas horas que ni recuerdo cuando me acoste escuchando el buenisimo disco que hizo Bret Michaels, el cantante de los denostados Poison, el genuino y primigenio novio de Pamela Anderson, amigo y socio del juerguista Charlie sheen, un gran disco de rock que ha poasado sin pena ni gloria por desgracias a la mala repuitaciòn de su creador, pero bueno este no es el caso que hoy nos atañe, resulta que ayer me puse a buscar de entre todas las dieciochomil fotos que tengo y encontre en la subcarpeta de una subcarpeta de un archivo oculto las malismas fotos que hacia una Konica que nos costo 99 euros de ofertisima en el corte ingles de preciados, la camara era una mierda en todos los aspectos, pero era tan pequeñita y manejable que daba igual que el resultado final fuese tan pesimo, de eso hace relativamente bien poco, fue en una visita madrileña que hicimos mary y un servidor con nuestro querido carlos house de maestro de ceremonias alojados en el hotel mas carca de madrid, el florida, donde solo habia excursiones de jubilados y extranjeros perdidos, eso si el desayuno y la moqueta del bufet libre eran una vuelta sin necesidad del delorean de marty macfly a la epoca del destape, a pesar de que en cada habitacion hubiese una '¡¡¡¡biblia de los jedeones¡¡¡ y el agua del baño estuviese tan fria comola del l agua del lago que esta a los pies del aneto para matar cualquier impulso sexual, que no se te hubiese quitado ya con la decoracion del hall, en fin un hotel digno de visitar para no querer volver, en esa visita nos dimos cuenta que los pueblerinos como nosotros todavia somos unos mendrugos, y gracias a dios, en comparacion con la gente guai de la capital, gente que se pasa los domingos de resaca en un brunch consumiento comida fria y farlopa mientras escucha musica chill out y paga tres veces mas de lo que deberia costar esa soja que a duras penas ingieren tras haber amanecido el dia anterior sin haberse acostado, ese ambientazo en el mitico "weekend" en pleno domingo por la tarde en el que tropiezas con los looks mas ambiguos y desfasados que te puedas imaginar, en fin una vida dura la del marchoso que vive en la capital y tiene una agenda repleta de reuniones sociales todos y cada uno de los dias de la semana, hasta que al final un buen dia explota, se le va la pinza, dice basta lo meten en un psiquiatrico o decide mudarse a una cabaña en el ampurdà para no volver a hablar nunca jamas con sus antiguos compañeros de juerga. Es un poco triste recordar a la gente que conocimos en ese viaje y lo falsa que es las sociedad actual, si señor no voy a entrar en detalles pero, las ultimas ocasiones que nos tropezamos con dos seres en concreto de ese viaje fuè un poco, bastante triste, esto me lleva a la conclusion de que el mundo de la musica house es una puta mierda pinchada en un palo en todos los aspectos, tanto preocuparse por pinchar en garitos con estetica lounge, tanto conocer a gente de lo mas In, tanto flyer y tanta poya que el final deja tan poco sedimento que el siguiente movimiento que este de moda borrara en un tris, al menos el sudor de los conciertos de rock te apega mas a la gente que conoces en ellos... sigo prefiriendo terminar la noche tomandome una hamburguesa en el zaida o planchando la orejita en una mesa del ecos mientras esperamos que nos sirvan unos sandwiches mixtos con aquarius o una only one con piña frente al reconvertido cine fraga